jueves, 29 de noviembre de 2012

E-M-P-A-T-Í-A

Retengan la definición de empatía, según el DRAE: "Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro".

Ya desde hace tiempo se dice que esta crisis no es solo económica, sino también de valores. No sé hasta qué punto será cierto, dado que aquí persiste desde hace siglos el espíritu de la picaresca y el vandalismo, de la envidia y de la mala hostia tan españolas, entre otras cosas (lo último llevo oyéndoselo decir a mi abuelo desde que tengo uso de memoria). Cualquiera de nosotros podría enumerar situaciones en las que han visto reflejadas estas cualidades. En una sola tarde de esta semana yo misma viví dos, de distinta magnitud pero con desesperantes rasgos comunes:


1) Concierto en el Palacio de los Deportes de Madrid, donde está prohibido fumar desde que entró en vigor la ley antitabaco o incluso antes. Pero como tantas otras veces me vi rodeada de gente fumando tabaco y porros a mansalva sin que nadie les dijera nada. Con "nadie" me refiero a algún trabajador del recinto: si me tengo que poner yo a discutir con cada uno de los fumadores apuesto a que no me harían ni caso e incluso alguno igual se pondría chulo (otra cosa muy típica de aquí: que te pillen haciendo algo malo y aun así envalentonarte). 

La impotencia era total, así que me tuve que pasar otro concierto más exasperada, tragándome el humo de esa gente a la que le importan tres huevos que a los de su alrededor pueda molestarles su fumeteo, al igual que no les importa el que estén en un espacio donde está prohibido fumar. Pero ya sabemos que aquí si uno no ve bien cerca el riesgo de una multa o sanción hace lo que le da la gana. Y esto va tanto por los que hacen algo malo como por los que lo permiten. Los que fuman en un sitio tan grande lo hacen porque ya han visto que nunca les pasa nada, y, por lo mismo, los gestores del recinto deben de estar muy seguros de que nunca recibirán una inspección mientras se celebra un concierto. Todo lo contrario se refleja en los bares, que son más pequeños: los clientes no fuman dentro porque el dueño les vería y les echaría a la calle, temeroso de que alguna autoridad descubriera que en el establecimiento no se cumple la ley antitabaco.





2) En el mismo día se estaba llevando a cabo un ERE (otro de tantos en los medios de comunicación) en Unidad Editorial. Una de las empresas afectadas era el diario deportivo MARCA. Mientras navegaba por Twitter esa tarde y noche, intentando averiguar qué se sabía de los despidos en el grupo, descubrí un buen puñado de tuits en los que sus autores se regodeaban de la situación de dicho periódico: todos afirmaban que lo tenían merecido por ir en contra del Real Madrid o de su entrenador.

Es cierto que también había usuarios que se solidarizaban con los empleados del periódico, y progresivamente los hubo que criticaron a los que se estaban mofando de los despidos. Ninguno entendíamos las motivaciones de los que se alegraban del ERE. ¿Solo porque no les guste MARCA se alegran de que unas 15 personas se vayan a la calle, y además en un país donde ya hay varios millones de parados? ¿Ninguno de ellos tiene familiares en paro para ver lo que se siente, o solo les importan los desempleados que tienen cerca? 

Alguno incluso razonaba que, como MARCA quería que echaran a Mourinho, él se alegraba de que echaran a gente de MARCA. Comparaba así a un grupo de periodistas 'curritos' (porque en este caso no se va a despedir a ningún directivo) con el entrenador mejor pagado del mundo, una persona que actualmente cobra 15 millones de euros anuales, al que no le va a faltar trabajo nunca (y siempre mejor remunerado que el anterior) y que, aunque se retirara hoy, su nivel de vida y el de toda su familia siempre se mantendrá muy alto. Una persona que en un solo mes cobra más que todos los despedidos en MARCA en un año.


Así, en unas pocas horas, pude ver esa explosión de falta de educación, de valores y de empatía en general. ¿Qué es lo que pasa aquí? ¿Por qué a algunos les importa tan poco que los demás lo pasen mal, e incluso se alegran por ello? ¿Se darán cuenta esos de su error cuando les pase algo a ellos u optarán por echar la culpa a otro?


(Sígueme en Twitter).

14 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo. La cultura, la tradicion y nuestra propia historia siempre nos a echo ser proprensos a la picaresca, a la tonteria y al enfrentamiento innecesario, aunque sepamos que no tengamos la razon...

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    1. Es triste decirlo, pero a juzgar por lo que veo creo que no tenemos remedio...

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  2. Ciertamente, vivimos en una sociedad actual, que vive en un gran estrés (No sé si esto vale de excusa), y que cada día es más egoísta. Se han perdido muchos valores, "la educación" brilla por su ausencia. Cada día vivo dicha ausencia siendo una simple viandante, veo como las personas si pueden te empujan o no se retiran aunque se vayan a chocar contigo por la calle y ni siquiera se disculpan si lo hacen. Mantienes una puerta y pasan como si fueras "el portero". Vas en el metro y se lanzan cual urracas a sentarse corriendo y si pueden te empujan para coger un sitio. Estos son simples ejemplos, podría extenderme aún mucho más. Con respecto al tabaco, afortunadamente no soy fumadora y me solidarizo totalmente con lo expuesto en éste fabuloso artículo, estoy totalmente de acuerdo. Habrán excepciones, pero por línea general, hay muchas personas fumadoras que son tremendamente "Egoístas", no les importa ni un pepino (siento la expresión)el que los demás se estén perjudicando con "sus humos" y diles algo...que encima de que está prohibido, se encaran contigo. Yo he visto hasta un caso dentro del metro, de una chica que se quejó de un hombre que iba fumando y hasta la insultó, le soltó varios improperios...Por otra parte con respecto a lo del ERE del MARCA, me parece INAUDITO, que hayan personas que se puedan alegrar e inclusive apoyar los despedidos basándose en lo que escribe o no El MARCA, al equipo o entrenador al que apoyen o no. Nos olvidamos que somos "Personas", ante todo. Aunque soy de las que pienso, que todo el mal que proyectamos hacia los demás, se vuelve contra nosotros. Gracias por el artículo y un saludo.

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    1. Muchas gracias por tu comentario, PennyLane. Es cierto lo que cuentas, esos detalles que todos vivimos a diario en el Metro son solo una pequeña muestra de lo espantosa que es mucha gente (el alegrarse del mal ajeno ya es la prueba absoluta). A mí todo eso muchas veces me llega a amargar y a pensar en hacerme ermitaña. Ninguno somos perfectos, pero la imperfección humana no está reñida con la educación y los valores. Ahí se diferencia la gente: en el saber estar.

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  3. Hola. Yo caí en el ERE de Unidad Editorial en junio. Recibí muchos mensajes de apoyo de compañeros, pero también tuve que leer algunos en la línea de la que hablas que me dejaron de piedra, porque es gente que no te conoce ni sabe cómo trabajas. Ahora soy freelance y puedo contar con los dedos de una mano los mensajes de apoyo que he recibido. En cuanto a lo de los modales y la educación esto está casi perdido. Es más, ahora me maravillo cuando la gente es amable y correcta (dependientes, funcionarios...) cuando es lo que tendríamos que percibir como normal. Gracias por llamarnos la atención sobre este tema, porque a veces encima cuando lo planteas te llaman exagerada y cursi.

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    1. Muchas gracias por comentar, TheGroupie. Te deseo mucha suerte en tu andadura como freelance, un camino que por lo que oigo no suele ser fácil.

      Habrá que hacer oídos sordos a los que nos critican a los periodistas o nos desean la extinción del gremio. Aquí a muchos les encanta dar lecciones de periodismo (¿por qué no darán también lecciones de ingeniería?), pero habría que verles a esos escribir un solo párrafo sobre cualquier tema...

      Muchos ánimos de nuevo, y te animo a que sigamos en contacto vía Twitter o LinkedIn ;)

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    2. Seguro que sí. Gracias por tus buenos deseos!

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  4. Creo con sinceridad que teneis razón: la crisis no es solo económica, es de valores. Es la crisis de un sistema que ha puesto el dinero por encima de las personas y hemos llegado a un sistema capitalista absolutamente inhumano, donde las personas son sólo números y se los hacer cuadrar como sea.
    En cuanto a la escala de valores en España, hemos llegado al punto de egoismo e individualismo total y si no hacemos nada al respecto, la sociedad dejará de ser "sociedad", para convertirse en un grupo de personas que se pelean en un mismo espacio, sin ser capaces de convivir. Y lo realmente gracioso es que están luchando por más dinero y más posesiones y más de todo, sin pensar que en cualquier momento se irán dejándolo todo aquí.
    ¡¡ÁNIMO the groupie!! ¡Suerte en tu nueva andadura!

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    1. Totalmente de acuerdo contigo, Maria Cruz. España ahora mismo es un "todo vale". Aquí se juntan el capitalismo voraz que impera en Occidente sumado a la falta de valores, así que vamos apañados...

      ¡Gracias por pasarte y comentar! =)

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    2. Gracias a ambas! así da gusto. Besos

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  5. Estoy totalmente de acuerdo contigo, incluso siendo fumadora, soy de las pocas que pregunta a la gente con la que comparto el espacio (en la calle, y que no tengo confianza) si puedo fumar (aunque sólo sea mera cortesía, y si me dicen que no, me voy más lejos y punto).

    No estamos educados a compartir espacios. Pensamos que la calle es nuestra y podemos hacer con ella lo que queramos. Romper papeleras, tirar mierda al suelo, etc... Yo soy de las que riñe constantemente a mis colegas para que no tiren porquería al suelo, y ellos se me enfrentan diciendo que así "contratarán más barrenderos" y solucionan los problemas del paro acuciante en España. Como si no hubiera otros trabajos más productivos que barrer sus porquerías.

    También somos un país de envidiosos. Y la envidia y el egoísmo (al fin y al cabo la primera es otra cara del segundo) son una combinación letal. Así, la gente que está jodida porque la vida le va mal, se alegra de que al resto de las personas también les vaya mal, es como que se sienten menos solos. O si esas personas estás bien, encuentran una risa malévola y maquiavélica en las desgracias ajenas. ¿Pero qué le hacemos? Si cuando sucede una catástrofe a todo ¡le encontramos un chiste! A pesar de que a los implicados no les haga ni p. gracia...

    Tal vez sea un problema que seamos así. Por suerte, hay una minoría que no lo somos, y sólo podemos reñir y dar ejemplo para ver si a alguien por emulación le da por portarse correctamente. Aún así, al menos queda el consuelo de que si aunque no fumes te da cáncer de pulmón, en este país de egoístas tendrás un pulmón de repuesto porque somos el que mayor tasa de donación tiene, y que si te quedas sin trabajo, saldrán los graciosos para hacerte chistes y reirte un rato, no ya de tus desgracias, sino también de las de los demás...

    ¡Ánimo!

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    1. Me alegra tu visión optimista; a mí me cuesta tenerla, creo que aquí no hay remedio porque hay más gente mala que buena. Pero siempre es muy agradable encontrar a personas bien educadas como tú y recuperar un poquito la esperanza =)

      Muchas gracias por pasarte y comentar.

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  6. Me ha encantado este post Virginia, yo desde mi blog intento inculcar valores de solidaridad y generosidad, pero desgraciadamente al igual que tú compruebo que mucha gente, cada vez más desgraciadamente, van a lo suyo y les importa muy poco lo que les pase a los demás. Sin embargo, también me he encontrado con mucha gente generosa que ha optado por prestar ayuda a los demás, y eso anima mucho, siempre nos quedará esa esperanza, ¿verdad?.
    Un saludo

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    1. Hola, Noelia. Pues sí, por suerte de vez en cuando nos encontramos personas que nos devuelven un poquito la esperanza de que no todo el mundo sea tan horrible. Pero ocurre tan poco, por lo menos a mí, que yo hace ya mucho que perdí la fe en el género humano, y mira que soy bien joven...

      Un saludo y gracias por pasarte.

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